martes, 19 de septiembre de 2017

LA HORA DE LOS PUEBLOS

Alguien alguna vez dijo “Si Perón en algún momento habló de la Hora de los Pueblos, es que hay otra hora que no es de los Pueblos”, y es justamente esa hora la que estamos viviendo en nuestro País.
Pero no somos un caso aislado, la derecha neoliberal avanzó en toda la región, ya no con las armas y golpes de estado, sino a través de las Corporaciones, sobre todo de la Corporación Mediática, mintiendo, ocultando y creando una realidad virtual. Lo hizo en Colombia, lo hizo en Brasil, lo hizo en Paraguay, lo hizo en Chile, está intentando a cualquier precio hacerlo en Venezuela y en Bolivia, y por supuesto lo hizo en nuestro país. Es por eso que todas y cada una de las medidas y acciones que realiza este gobierno fraudulento desde que asumió son siempre para favorecer a las Corporaciones, de las cuales son empleados del primero al último funcionario.

Nuevamente como a lo largo de toda nuestra historia, esta Oligarquía Unitaria ha llegado al poder, truncando un modelo de país grande, desarrollado e industrial. Como ya lo hicieron en su momento contra José de San Martín, contra Juan Manuel de Rosas, contra Hipólito Irigoyen y contra Juan Domingo Perón.

Tanto Néstor como Cristina tenían una visión federal de país, y es por ello que siempre las medidas adoptadas fueron en una misma dirección: la gente. Intentando achicar esas asimetrías existentes e intentando desarrollar el olvidado Norte y el olvidado Sur argentino. Ello, más quitarle los eternos beneficios a los verdaderos poderosos, beneficios que siempre tuvieron a costa del hambre del pueblo; y también empoderando al pueblo acerca de sus derechos, fue el motivo que despertó el odio acérrimo de estos “traidores a la patria”.

Tal es su desinterés por el otro, que hasta sus personeros y seguidores locales (léase UCR y PRO de Formosa) apoyan cuanta medida favorezca a las provincias centrales perjudicando a la suya propia, sin darse cuenta que a los mismos que les sacan el plato de comida de sus mesas con estas medidas, es a quienes van a pedirle luego el voto en esta campaña electoral

A los más grades les pedimos memoria, que recuerden cómo terminó esta aventura neoliberal en el 2001, partiéndonos en pedazos como país, obligándonos a usar cuasimonedas y enviando millones de argentinos al hambre y la miseria.

A los jóvenes les pedimos que sean rebeldes, que sean revolucionarios, que no se dejen llevar de las narices por los grandes titiriteros que son los programas de televisión ni por los globos de colores. Recuerden lo que dijo Perón “que así como no nace el hombre que escape de su destino, no debiera nacer el que no tenga una causa noble por la cual luchar, justificando así su paso por la tierra”.

Ya están las listas, ya están los candidatos, ahora es cuando tenemos que salir a defender a Formosa con la mejor herramienta que tenemos: el voto. Demostrarles que están equivocados en el rumbo, porque lo están. Esta GENERACIÓN INTERMEDIA  a la que pertenezco, más la nueva Generación, están en marcha para llevarnos nuevamente al triunfo en nuestra Patria e imponer definitivamente las banderas de Independencia Económica, Soberanía Política y Justicia Social.

!Ha llegado el momento, es la hora de la verdad, es la HORA DE LOS PUEBLOS!

martes, 5 de septiembre de 2017

EN EL PAÍS DEL NO ME ACUERDO



María Elena Walsh, una de las mentes más creativas de nuestro país, fue censurada durante la última Dictadura por escribir canciones como ésta y muchas más. Inclusive “en el país del no me acuerdo” fue una de las músicas usadas en la película “La Historia Oficial” que llegó al Oscar, donde se cuenta el robo sistemático de bebés y muestra también la complicidad civil con los militares de esa Dictadura acerca de aquel horror que hasta hoy nos avergüenza como país.

Lamentablemente vivimos en el país del No me acuerdo, olvidamos todo muy rápido, y al hacerlo somos nuevamente carne para los mismos carroñeros de siempre.

Lamentablemente nuestros abuelos olvidaron lo que les contaron sus abuelos acerca de la represión y masacre sufrida por el Movimiento Obrero Argentino en una semana de enero de 1.919, donde fueron asesinados cientos de personas y que se conoció como LA SEMANA TRÁGICA.

Lamentablemente nuestros padres también olvidaron lo que les contaron sus padres, cuando un grupo de militares y civiles bombardearon y ametrallaron desde el aire a la Plaza de Mayo, hecho también conocido como LA MASACRE DE PLAZA DE MAYO, matando a más de 300 personas e hiriendo a más de 700, con el único fin de matar al Presidente Perón, sin importarles el Pueblo argentino.

Nuestra generación también parece haber olvidado lo que fue la última Dictadura cívico-militar, que se caracterizó por el Terrorismo de Estado, las violaciones a los Derechos Humanos, la desaparición y muerte de miles y miles de personas, y muchos más crímenes de lesa humanidad.

Todo esto pareciera que hemos olvidado como sociedad, pareciera que entramos en un letargo somnoliento manejados por los medios de comunicación como zombis, que no alertamos lo que estamos viviendo. La mitad del pueblo argentino creyó en los cantos de sirena de los descendientes de aquellos civiles que participaron en todas las etapas oscuras de nuestro país. Un gobierno que arranca con una presa política, nombra jueces a dedo, gobierna por decreto, comete fraude electoral y como si fuero menos carga con un desaparecido. Todo ello sin contar ni enumerar lo que hace en contra del pueblo y lo que hace a favor de ese puñado de argentinos de clase alta que siempre manejó los hilos del poder de nuestro país. Y toda sociedad que no conoce su historia está condenada a repetir sus errores.

Nuevamente somos reprimidos y cazados como animales, como en aquellos nefastos años, nuevamente nos quieren implantar el terror. Nuevamente muchos miran para el costado renovando aquel tristemente famoso “algo habrán hecho”. Nuevamente todo el peso de la historia cae sobre nosotros.

Como sociedad, todos juntos debemos salir a frenar estas cosas que están pasando, debemos parar esta locura que sabemos cómo empieza pero no sabemos cómo puede llegar a terminar.
Hagamos que esa música infantil de María Elena Walsh “En el país del NO me acuerdo” sea sólo eso, una música infantil. Frenemos a éstos infames traidores a la Patria. Y que por una buena vez nos contesten ¿DÓNDE ESTÁ SANTIAGO?


Ya van 30.001, no nos puede ganar el mal ¡NUNCA MÁS!