Un
sótano es una de habitación de una casa, que se encuentra por debajo de ésta,
que por lo general es oscura o con muy poca luz, un lugar lúgubre, húmedo y
casi siempre asociado con aspectos negativos.
Nuestro
Presidente Alberto Fernández, en uno de sus discursos habló sobre la necesidad
de una reforma de la Justicia Federal, de la intervención de la Agencia Federal
de Inteligencia, y de la desvinculación entre ambas.
Sus
palabras fueron: “Nunca más una Justicia
contaminada por Servicios de Inteligencia, nunca más a una Justicia contaminada
por operadores judiciales, procedimientos oscuros y linchamientos mediáticos”…
“Lo hago con la firmeza de una convicción profunda. Nunca más al Estado
secreto, nunca más a la oscuridad que quiebra la confianza, nunca más a los
Sótanos de la Democracia. Nunca más es Nunca Más”.
Todas
estas declaraciones, esta época de cambios de paradigmas, éste tiempo en que
pareciera ser que los Argentinos hemos recuperado la memoria, que entendimos de
qué se trata y cuál es el rumbo a seguir y de qué manera, todo esto se ve
empañado por varios dirigentes de la anterior gestión, cuando se empiezan a
ventilar y a descubrir un montón de cosas, de maniobras, de operetas, de
carpetazos, de fábulas, de un sinfín de casos de corrupción, que la plata de
los bolsos de López eran de Niky Caputo (mano derecha en los negocios del ex
Presidente), que la causa de los cuadernos los involucra a todos ellos, que la
plata que se contaba en “La Rosadita” era de ellos, que se destinaron millones
de pesos para pagar a punteros políticos en las elecciones bajo un disfraz de
desocupación, y otros tantos millones que quedaron en una nebulosa, causa por
la que se encuentran imputados varios comprovincianos nuestros, las coimas en
los contratos, las deudas obtenidas mediante inventos, etc etc. Y que encima se
hagan pasar por los adalides de la República. Todos estos hechos te llevan a
concluir que ellos son los que están en esos Sótanos de la Democracia. Y es
quizás por eso, inconscientemente queremos creer, que nos quisieron llevar hacia esas
profundidades. Nos dejan con una inflación por encima del 50% (la peor desde
1991). Con una desocupación más alta que la que heredó Néstor Kirchner. Un
dólar que llevaron en forma adrede de $9 hasta $63. Con un PBI que es el más
bajo de la última década. Con un retroceso enorme en la lucha contra la
pobreza. Con una Deuda Externa eterna e impagable. Un default técnico. Valores
alarmantes de indigencia. Con más de 20.000 Pymes cerradas, de las cuales más
de 4.000 eran Pymes Industriales. Pero además de todos estos números
desastrosos, lo más triste es la desesperanza y la desolación a la que llevaron
a gran parte del Pueblo argentino, nuevamente una generación condenada a un
futuro incierto, una generación diezmada y sobreviviendo de la manera que
puedan, con todo lo que ello implica (drogas, alcoholismo, delincuencia, etc).
La fragilidad que tenemos es extrema.
Jueces,
Fiscales y periodistas de alcance nacional, cómplices de esta gran estafa al
Pueblo argentino. Empresarios que se hicieron pasar por políticos con el único
fin de incrementar exponencialmente sus patrimonios, dejando de lado la máxima
de todo dirigente político y social que es el Bien Común, que es lograr una
sociedad mejor y más equitativa.
Lo bueno de todo es que el Sol siempre sale,
y empezó salir para todos y todas, pero también debemos recordar que tenemos
una obligación y un compromiso militante, que es iluminar a aquellos que aún se
encuentran en dichos Sótanos, porque aunque no se den cuenta también son parte
de nuestro País. Y porque volvimos para ser mejores, volvimos para unir, volvimos
para dar vuelta esta página de nuestra historia, para nada buscamos venganza ni
revanchismo de sus atropellos, de sus proscripciones, de sus persecutas, sólo
exigimos Justicia, pero de la real, no más de la mentira mediática.
Tenemos grandes dirigentes, grandes
líderes dispuestos a dejar todo para salir de este oscuro período, período que
cuando los escuchamos hablar pareciera ser que ellos mismos intentan olvidar,
pero es justamente lo que no hay que hacer, hay que recordar siempre que acá
pasó Macri, que acá pasó el engaño mismo. Un nuevo Sol está naciendo en el
Oriente, y vamos a poner a la Argentina de Pié, por más difícil y cuesta arriba
que sea el camino lo vamos a hacer. Hace más de 200 años San Martín nos
arengaba “Ánimo, que para los hombres de
coraje están hechas las Empresas”. Perón decía que el valor es una virtud y
no puede delegarse, y valor en estos dirigentes es lo que sobra. No debemos
tardar mucho porque hay un Pueblo sufriendo, hay un pueblo que volvió a confiar
y a tener fé, y que está dispuesto a salir adelante.
En estas épocas que nos llaman a la
reflexión y a realizar balances, tengamos todo esto bien presente. Si hay algo
que nos caracteriza a nosotros los peronistas, es que tenemos cada uno nuestro
bastón de Mariscal, no somos cobardes ni timoratos, y siempre estamos
dispuestos a poner lo que hay que poner por el bien de la Patria.
Paz y Bien para todos y todas, que el
2020 nos encuentre más unidos que nunca y todos tirando para el mismo lado,
porque al abismo ya lo conocimos, ahora salgamos todos juntos de este Sótano.
¡Felices Fiestas!
¡Viva la Patria! ¡Viva la Argentina!
