El Hombre y el Modelo Formoseño y no El Formoseño en el Modelo, porque este Proyecto Provincial tiene como máximo objetivo el beneficio de todo el Pueblo Formoseño, hayan nacido o no en esta bendita tierra.
Cuando empezamos a transitar este proyecto fundacional y revolucionario las necesidades eran muchas, Trabajo, Educación, Vivienda, Salud, Producción, Integración Territorial y Regional, Dignidad, y quizás lo más importante para todo pueblo: Identidad. Formosa necesitaba entonces definir un Modelo y un Proyecto Provincial para una sociedad que se reconoce multiétnica, pluricultural y multilinguística.
Así hemos encontrado el reflejo de nuestra concepción ideológica en el Sur del País, en un hombre al que le debemos mucho y que quedará en nuestra historia y nuestro recuerdo para siempre, un hombre que al llegar a la presidencia del país, estoy hablando de Néstor Kirchner, se volcó a sanear todas estas necesidades, estas inequidades; pero también hay que dejar bien en claro que sólo fue posible gracias a la planificación estratégica realizada por la Gestión Gildo Insfrán, y que gracias a esto se pudieron ensamblar ambos Modelos y se han realizado y se continúan realizando muchísimas obras que creo no hacen falta enumerarlas, el pueblo sabe, reconoce y agradece todas y cada una de ellas. Lo que sí debemos resaltar es el fin de todas estas realizaciones: EL HOMBRE. Como dice el libro "El Modelo Formoseño. Fundamentos filosóficos y doctrinarios" "Pocos lugares de la Argentina han podido hacer efectiva la idea cristiana que considera al Ser Humano como eje trascendental de la vida. Si algo va a perdurar en la memoria de la Formosa del nuevo siglo no es sólo el bienestar que empiezan a gozar sus hombres y mujeres, sino las posibilidades de verdadero progreso y perfeccionamiento personal de que disponen. Hoy el formoseño puede trabajar, producir, comprar, vender, estudiar, inventar, planificar, participar de la cultura, disfrutar de los momentos de ocio, es decir vivir la vida en plenitud...".
Estamos empezando a transitar una nueva etapa; una etapa donde todos los sueños y anhelos de nuestros padres y abuelos se están haciendo realidad; una etapa en la que el hombre puede sentir y percibir el alma de este Modelo; una etapa que hace al pueblo mas unido y que tal unidad se ve reflejada en sus rostros felices; una etapa que debemos militarla y defenderla; una etapa que estoy convencido será la base fundacional de la gran dicha que nos tiene deparado el destino, de esa gran bendición que es ser el corazón del paraíso llamado Suramérica, de ser el costado norte de la patria y puerta de ingreso a esta nueva Argentina, en definitiva de esa gran bendición que es SER FORMOSEÑO
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