Corrupción, deslealtad, incumplimiento de promesas, abuso de poder, traición a la confianza pública, impotencia, vergüenza... son algunos de los motivos que me llevan a escribir estas líneas.
Ver lo sucedido hoy en el Congreso de la Nación (sin la palaba honorable a propósito), despertaron en mí muchas emociones y recuerdos que pensé nunca los iba a volver a vivir ni ver, lo peor es que conozco, y conocemos, como va a terminar todo, es como un deja vú y sabemos cual va a ser el final de toda esta vergüenza.
Corría el año 2000 cuando me tocó vivir, desde adentro, ese episodio oscuro y nefasto que la historia luego calificó como "Ley Banelco", por aquellos años se trataba una reforma laboral que era por todos lados mala y desfavorable para los trabajadores, el partido de la Alianza de Fernando de la Rúa tenía la mayoría en Diputados, pero no así en el Senado, y el triste Ministro de Trabajo de ese entonces (Flamarique) decía "para los senadores tengo la banelco", que no era otra cosa que pago de sobornos y coimas. Fue el principio del fin de un gobierno inepto en su totalidad
Hoy estamos viendo perplejos una versión actualizada de la banelco. Legisladores que aceptan puestos millonarios en otros lados a cambio de su voto, otros que habiendo sido los impulsores del proyecto son comprados por este "Presidente", ¿o alguno cree que este cambio de pensar es gratis?. Presidente que llamaba ratas a estos diputados, y con su accionar lo único que hacen estos diputados es demostrar que son las ratas a las que se refería Milei.
A veces me pregunto ¿en que momento caímos tan bajo como sociedad?, a mí me enseñaron que los Legisladores eran honorables y trabajaban por un mejor país, que el Presidente era alguien que amaba a su pueblo y haría lo que fuera por buscar el bien y el progreso de la sociedad toda. Ver que son todo lo contrario, que cualquiera con la menor, o ninguna, formación y preparación hoy ocupa un cargo en este gobierno tomando decisiones que nos repercute a todos, que lo único que hacen es hacernos pasar vergüenza cuando no están perjudicando a algún sector, o pegando y reprimiendo a nuestros jubilados, tira por tierra todo lo que alguna vez me enseñaron, provocándome tristeza y bronca.
Esto se para de una sola manera y es con el pueblo en la calle, con los dirigentes a la cabeza, dirigentes varios que están jugando a las escondidas y no se ponen los pantalones largos que se tienen que poner.
Como dice la canción de Fito "Salir al Sol"
"Hay que salir a pelear
hay que salir a luchar.
Hay que volver a encontrar
todas las cosas divinas
defender el lugar.
Tenés que hacerte valer
no sos un trapo de piso
Hoy decidís un país
Podés cambiar este gris
ahora o no lo hacés más
Es el momento..."
Hay que salir, es el momento, tenemos que decirles ¡BASTA!
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