LA MUJER Y LA FELICIDAD, dos palabras con un mismo significado

En este mes de marzo nos encontramos con el Día Internacional de la Mujer y con los Feriados de Carnaval.

Los Carnavales son sinónimos de felicidad, de alegría, de fiesta del Pueblo, donde todo el mundo lo único que busca es pasarla bien. Los feriados de Carnaval son algo largamente anhelado, algo por lo que se luchó mucho y que la peor Dictadura militar que además de asesinar y hambrear al pueblo pretendió matar la alegría, entristecernos, y prohibió el carnaval. Ya Arturo Jauretche decía “Nos quieren tristes porque los pueblos deprimidos no vencen. Por eso venimos a combatir por el país alegremente. Nada grande se puede hacer con la tristeza”. Y no nos pudieron vencer, nos quisieron sacar nuestra identidad, pero por más que 30.000 veces nos mataran, 30.000 veces resucitamos.

La FELICIDAD también es sinónimo de AMOR, y es esta la sensación que tenemos todos por nuestra querida Formosa, nuestro costado norte de la Patria; dicen que Formosa es como esas novias que uno nunca las olvida, todo lo que nos caracteriza como provincia nos lleva inmediatamente a nuestros primeros pasos, a la felicidad adolescente, el olor al mango, al jazmín, los lapachos florecidos, la flor del chivato, el Río Paraguay y su romántica costanera, cada recuerdo ligado a estas postales nos despiertan una tierna sonrisa.

Y todo ello nos lleva directamente hacia la MUJER, la criatura más bella de la creación. Un pensamiento anónimo dice:

La mujer salió de la costilla del hombre,

No de los pies para ser pisoteada,

Ni de la cabeza para ser superior,

Sino del lado para ser igual,

Debajo del brazo para ser protegida y

Al lado del corazón para ser amada.

No hagas llorar a una mujer

Porque Dios cuenta sus lágrimas.

            En nuestra cultura, nuestra idiosincrasia la mujer es el pilar fundamental de una familia. Ya la cultura Guaraní es matriarcal, y las máximas devociones son hacia nuestras veneradas Virgencitas. Y si alguien alguna vez alguien osa ofenderlas el tango nos recuerda “pensá tu madre fue novia… después si querés hablá”.

            Es por eso que no se puede hablar de la mujer y de la felicidad como cosas separadas cuando significan lo mismo.

                        ESTE MODELO FORMOSEÑO PONE A LAS MUJERES EN LO ALTO DE LA PIRÁMIDE, Y LO PRIMORDIAL EN LA BASE DE ELLA ES LA FELICIDAD DE TODA LA COMUNIDAD, Y EN EL MEDIO EL ALMA, EL ESPÍRITU DEL PUEBLO Y TODO LO DEMÁS, PORQUE NO SE ENGRANDECE A UN PUEBLO CONSTRUYENDO ALTOS EDIFICIOS SINO ELEVANDO EL ALMA DE SUS HABITANTES.

‘FELÍZ DÍA A TODAS LAS MUJERES

PORQUE USTEDES SON LA RAZÓN DE NUESTRAS VIDAS!

Luis A. Sebriano (h)